El 5% de las adopciones en Galicia acaban ‘truncadas’
Están relacionadas con fallos en la evaluación de los padres y con sus expectativas demasiado ‘idealistas’
Compartir en: agencias. santiago – 16-06-2013 La adopción es un puente que conecta una necesidad y un deseo, y cuyo recorrido permitió en 2012 construir en Galicia casi 200 familias. Sin embargo, y a falta de datos oficiales, en torno a un 5% de los que iniciaron este tránsito acabaron en lo que los expertos denominan una ‘adopción truncada’, es decir, con la devolución de la tutela del menor a la administración, con su ‘abandono’.
‘En Europa, este porcentaje ronda entre el 8 y el 15%’, ha comparado, aludiendo a adopciones internacionales y de niños con necesidades especiales. De todas formas, ha resaltado la ‘dificultad’ de acceder a estos datos, ya que apenas existen trabajos al respecto. El último fue elaborado por la Generalitat de Cataluña y revelaba que 72 de 12.000 niños adoptados habían sido abandonados por sus familias en la década 2000-2010.
Otro aspecto en el que ha profundizado Ana Berástegui es en que no sólo se consideran ‘adopciones fracasadas’ las que finalizan con el retorno del menor al sistema. También existen, ha explicado, las ‘pseudorrupturas’. Son ‘familias que no están oficialmente rotas’ pero en las que los padres únicamente ‘se encargan de los gastos’ de su hijo, que puede estar ‘internado’ en un colegio o un centro psiquiátrico.
‘FRACASO’
Sea cual sea el número exacto de las adopciones frustradas, para la técnica jurídica de la asociación Mimo en Galicia, Ana Miramontes, ‘sólo’ con que se produzca uno de estos casos ya ‘supone un fracaso’. ‘Un fracaso de todos’, enfatiza, dada la ‘huella’ que deja tanto en el menor como en sus padres.
En lo que hace mucho hincapié es en que renunciar a la custodia de un hijo adoptivo es como hacerlo con ‘un hijo biológico’. Asimismo, la presidenta de Manaia, Beatriz Caamaño, incide en que ‘un niño, adoptado o biológico, no se devuelve; se abandona’. En la misma línea, desde Addis Galicia, que gestiona adopciones de Burundi y Etiopía, remarcan que, si bien el porcentaje de adopciones truncadas es ‘bajo’, cada una tiene ‘un peso enorme’. ‘Es un drama’, resumen.
El contrapunto a estas visiones lo pone el presidente de la Fundación de apoyo a la infancia y al bienestar (Faiben), Ángel Martínez, quien prefiere quedarse con que ‘más del 80 por ciento’ de las adopciones ‘salen bien’, aunque cada abandono es ‘terrible’. ‘Es un sufrimiento muy grande para los padres, y para los niños es un abandono más’, subraya.
‘ADOPCIONES ESPECIALES’
La entidad que lidera se encarga, en el ámbito nacional, de las denominadas ‘adopciones especiales’: niños con problemas, mayores de ocho años o grupos de hermanos, es decir, los que escapan de las preferencias habituales a la hora de acoger un menor.
Pese a que los solicitantes conocen de antemano las características de estos niños y de que su asociación prevé un proceso de acompañamiento ‘muy largo’ una vez el menor se instala en su casa, el nivel de abandono, como ha apuntado, ‘ronda el 15%’.
De hecho, según sus datos, de los 26 menores que encontraron un hogar entre 2005 y 2011, cinco de ellos no concluyeron con éxito la integración familiar. Pero, ha puntualizado, la mayoría de las renuncias se produjeron durante el acogimiento preadoptivo, el tiempo de convivencia antes de que se formalice legalmente el vínculo paterno-filial.